La dificultad de reconocer el abuso sexual de tu pareja
La última edición del concurso de Miss Perú ha dado la vuelta al mundo. Y no ha sido por la espectacularidad de las candidatas sino porque en el momento del certamen en el que debían presentar sus medidas corporales, las 23 representantes denunciaron las cifras relacionadas con la violencia de género en su país, desde el grado máximo de los feminicidios hasta las formas más sutiles, como el acoso callejero. La iniciativa, que al parecer fue impulsada por la organización del concurso, ha sido aplaudida internacionalmente y se ha hecho viral en las redes sociales.
Más allá del debate sobre la oportunidad de estas denuncias precisamente en un contexto de mercadeo de cuerpos femeninos, nos quedamos con la sensibilidad de citar no solo las formas más mediáticas y evidentes de la violencia machista, sino de volver la mirada también hacia la agresión en la pareja, ese ámbito que quizás sigue siendo el más silenciado socialmente. Bélgica Guerra, representante del departamento de Chincha en el citado concurso, anunció: “El 65% de las mujeres universitarias son agredidas por su pareja”. La declaración además rompe con el estigma de asociar el maltrato ejercido por los hombres hacia las mujeres con contextos de bajo nivel sociocultural, cuando las estadísticas nacionales e internacionales no avalan esta creencia.
La violencia psicológica y sexual es de difícil percepción en el noviazgo/matrimonio. Lo es para adultos/as y mucho más para adolescentes. Desde Delfoteatro creemos sin embargo que es necesaria la concienciación de este tipo de agresión precisamente en edades tempranas, a propósito de las primeras experiencias amorosas, de ahí que sea uno de los aspectos que se abordan en los Sketch por la No-violencia que desde hace años representamos en institutos de la Comunidad de Madrid.
Pese a que verbalmente la pareja actor-actriz evidencia el abuso psicológico, este último aspecto entraña más dificultades en el análisis posterior que el alumnado realiza con la dinamizadora de DelfoTeatro. Incluso los insultos del chico hacia la chica pasan a veces desapercibidos (“histérica”). Les impacta el abuso físico, cómo él la avasalla, ocupa su espacio, impone su abrazo y sus besos pese al rechazo de ella. Y ante las preguntas posteriores, hablan de violencia “física” pero el adjetivo “sexual” les cuesta. La dinamizadora les lleva a entender la baja autoestima que el chico ha causado en su novia y que le lleva a soportar y silenciar una relación a todas luces tóxica. Ante esta escena, las alumnas se sienten especialmente incómodas y respiran con el sketch posterior que muestra a una pareja sana, igualitaria, en la que los celos no tienen cabida y los espacios físicos y los deseos individuales se respetan.
En una sesión posterior, la dinamizadora de DelfoTeatro vuelve al aula para reforzar el contenido de los sketchs y recuperar las reflexiones previas. ¿Hasta qué punto nuestra pareja respeta nuestros deseos como mujer? ¿Cuál es la alerta del abuso (físico, sexual, psicológico)? ¿A quién debo acudir si vivo esta situación? Interrogantes fundamentales para iniciarse en el mundo del amor y el sexo de la forma más sana posible.